Poesía completa. Paul Auster. Seix Barral. Traducción y prólogo de Jordi Doce. 318 páginas.
A menudo he escuchado la afirmación, contundente, de que a un escritor se le termina de conocer por su poesía. No estoy de acuerdo con esa tesis, para nada, sin embargo, en este caso sí podría resultar válida. Asegura Auster, sin ningún ápice de duda, que su poesía es lo mejor que ha escrito nunca y que todavía siente mucho apego por ella.
Y es normal que sea así. En la poesía del autor neoyorquino encontramos lo que podría ser el germen de su narrativa. En verso, el escritor aborda los mismos temas que desfilan por novelas como La música del azar, Brooklyn Follies o Invisible, entre otras. Y no son otros que el azar y la importancia que tiene a la hora de cambiar una vida, el yo y como su presencia modifica todo lo que hay a su alrededor, las barreras que imponemos –o nos impone- la realidad, o la mismísima derrota, más lírica esta vez que nunca.
Nada sería igual si la edición de la obra no fuese como es. Presentada en edición bilingüe, traducida y prologada, de manera magnífica, por Jordi Doce, la obra nos ayuda a comprender mejor al autor en su conjunto: sus obsesiones, su pasión, lo que su ciudad significa para él… En definitiva, Poesía completa supone el marco perfecto para encuadrar la obra narrativa de Paul Auster y comprenderla en su totalidad.
Desde los nueve hasta los treinta años, el niño pasó a ser hombre, pero nunca abandonó la escritura de poemas. Hasta que sintió que no podía más, en ese campo estaba todo dicho. Fue algo así como un agotamiento del terreno, que ya no podía dar más frutos. Entonces comenzó a escribir sus novelas, de las que hasta ese momento sólo había conseguido escribir páginas sueltas; nunca concluir un libro.
Ahora, Seix Barral recupera toda su poesía en este fantástico volumen, que concentra sus ocho poemarios junto a una especie de poética del autor titulada Notas de un cuaderno de ejercicios, fechado en 1967.
Publicado en Punto de Encuentro